Este nivel de energía muy positivo puede verse como la puerta de entrada a los niveles superiores de conciencia. Por ejemplo, en el nivel Neutral el trabajo es realizado adecuadamente, en el nivel de la Buena Voluntad, el trabajo se hace bien y el éxito es común en todas las actividades. El crecimiento aquí es rápido, son las personas «elegidas de antemano».
La voluntad implica que se ha superado la resistencia interna a la vida y se está comprometido con la participación. Por debajo del nivel 200, las personas tienden a ser de mente cerrada, pero en el nivel 310, se produce una gran apertura. En este nivel la gente se vuelve genuinamente amigable, y los éxitos sociales y económicos parecen seguir automaticamente. El que está bien dispuesto no está preocupado por el desempleo; ellos aceptaran cualquier trabajo cuando tengan que hacerlo, o iniciaran una carrera, o se auto-emplearan. No se sienten menospreciados por los trabajos de servicio o por empezar “desde abajo”. También son útiles a los demás y tienden a ser voluntarios, contribuyendo al bien de la sociedad. También están dispuestos a enfrentar los problemas internos y no tienen grandes bloqueos de aprendizaje.
En este nivel, la autoestima es alta y reforzada por la reacción positiva de la sociedad en forma de reconocimiento, apreciación y recompensa. La Buena Voluntad es simpática y responsable a las necesidades de los demás. Las personas voluntariosas son constructivas y contribuyen a la sociedad. Con su capacidad de recuperarse de la adversidad y aprender de la experiencia, tienden a autocorregirse.
Al haber dejado de lado el Orgullo, están dispuestos a ver sus defectos y aprender de los demás. En el nivel de la voluntad, las personas se vuelven excelentes estudiantes y representan una fuente considerable de poder para la sociedad.
EL MAPA DE LA CONCIENCIA